Desatrancar con sosa

3 de julio de 2018

Entre los muchos productos y objetos que pueden servir para realizar desatrancos, está la sosa. Estamos hablando de un químico abrasivo, con lo cual habrá que tomar medidas más cuidadosas que cuando nos referimos a desatascos con vinagre, levadura, etc. La sosa ofrece varias ventajas; su potencia como desatrancador es una de ellas; puede disolver todo tipo de restos orgánicos, aunque como decimos han de tomarse precauciones antes de su utilización. Entre esas precauciones destaca vestirse de forma adecuada, protegiendo zonas del cuerpo a las que puedan llegar salpicaduras. Manos, brazos, piernas... deberán estar bien protegidos.

Tras ponernos los guantes y las demás prendas, mediremos una tacita de sosa y la echaremos por el sumidero. Es importante que el sumidero de la instalación esté completamente seco y libre de restos de agua. Esta será la manera de que el producto penetre sin hacer grumo. Sin esperar mucho tiempo, echaremos agua hirviendo, un litro aproximadamente. Con el agua y la sosa, los restos incrustados y los tapones que provocan el mal olor van desapareciendo y degradándose.

Para comprobar su total efectividad, hay que abrir el grifo y comprobar si el agua corriente se cuela como es debido sumidero abajo. Desatrancar con sosa puede ser muy fácil, pero también imposible si la situación del atasco está en un lugar alejado de la instalación. Por ejemplo, en el caso de que las obstrucciones se presenten en zonas alejadas y complejas, solo queda el remedio de contratar los servicios de especialistas que mediante cámaras de TV determinarán el punto donde se halla la incidencia, y así poder darle solución mediante el agua a presión, uno de los procedimientos más adecuados para limpiar tuberías. Puede solicitar también información sobre desatrancos en alcantarillas, en arquetas y en otras instalaciones que están fuera del límite dentro del cual pueden trabajar los usuarios particulares.